Resumen:
Para la elaboración del presente trabajo se realizaron entrevistas
semiestructuradas a 11 adolescentes escolarizados en instituciones públicas y
privadas ubicadas en los municipios de Itagüí, Medellín, Envigado, Bello y
Copacabana, en el año 2007 – 2008, con las cuales se indagaron las
percepciones que ellos tienen acerca de la educación sexual que reciben en la
Escuela. En el escenario de la escuela se abordan contenidos explícitos al
desarrollar los proyectos de educación sexual, es decir aquellos temas visibles
ante los actores entendiendo actores como lo propone Ofelia Roldan (2007),
como aquellas personas que intervienen activamente en el ambiente educativo
para que se dé el proceso de enseñanza – aprendizaje (pp. 33-38). Dentro de
estos contenidos se encuentran: los métodos de planificación familiar, los
métodos de protección sexual, las enfermedades de transmisión sexual, la
concepción de sexualidad desde una perspectiva biológica, sin contemplar la
dimensión comunicativa, afectiva y erótica, que si son consideradas por los
adolescentes como lo reiteran en las entrevistas.
Los contenidos no explícitos o implícitos son aquellos que no aparecen
claramente definidos o señalados en el proyecto pero que de una u otra manera
se hacen presentes cuando se aborda el tema de la sexualidad y los contenidos
que los adolescentes incluirían al hablar de sexualidad.
Pero también es importante resaltar que en el escenario escolar suceden
interacciones desde las cuales se dan lazos de confianza. Las relaciones de
confianza que allí se tejen y los secretos aparecen como un contenido no
explícito pudiendo considerarse elementos facilitadores u obstaculizadores al
hablar de sexualidad entre la familia, los docentes, los pares y/o amigos y los
adolescentes, como lo dieron a conocer los participantes en algunas de las
entrevistas cuando se referían a los secretos que se tenían con algunos miembros de su familia y la confianza que adquirían con otros individuos como los docentes o amigos.
El estudio además expresa la percepción que los adolescentes tienen de las
metodologías y didácticas empleadas en la Escuela para abordar la Educación
Sexual y que, por lo general, se consideran “aburridas y monótonas”. Se hace
importante resaltar que a pesar de involucrar a profesionales del área de la
salud y la educación (como psicólogos, enfermeras) con conocimientos
específicos de lo conceptual, para impartir o dirigir las actividades de educación
sexual, estás no necesariamente desarrollan las didácticas y la pedagogías que
constituyen el eje fundamental del proceso educativo, por lo cual no se favorece
un proceso enseñanza – aprendizaje que sea realmente significativo.