Resumen:
Los estudios e investigaciones realizados a nivel internacional, nacional y regional sobre participación política de niñas y niños son amplios desde la perspectiva de derechos, pero pocos en cuanto a participación y vivencias afectivas en el ámbito familiar. Es de anotar también que la mayoría de estudios e investigaciones sobre el tema en mención, centran su atención en niñas y niños que son o han sido víctimas del conflicto armado, población trabajadora y con algún tipo de discapacidad. No se reportan mayores estudios sobre el tema de participación con población de niñas y niños no vulnerables, y mucho menos con población de niñas y niños en un rango de edad de 5 a 6 años.
La investigación titulada Las jirafas también bailan: una apuesta por el reconocimiento de las vivencias afectivas de niñas y niños de 5 a 6 años en los procesos de participación en el ambiente familiar, es una propuesta que tuvo por objetivo interpretar las vivencias afectivas en los procesos de participación de niñas y niños de 5 a 6 años en el ambiente familiar.
Por esta razón, se abordaron aspectos teóricos referidos a la familia, tales como relaciones y manifestaciones afectivas entre sus miembros. El abordaje de estos temas se realizó desde las propuestas de Nussbaum (2008) y Maturana (2003).
Por último, sobre la categoría participación política se abordaron como temas centrales los conceptos, el derecho y los modos de participación. Los autores que sustentaron lo anterior son Hart (1993), Giddens (1997) y Baratta (1998).
Para lograr el objetivo planteado por la propuesta investigativa, se recurrió al enfoque metodológico hermenéutico, dado que el interés del estudio contempló la necesidad de acercamiento a la experiencia de niñas y niños desde su propia percepción y realidad, tal y como sus protagonistas la vivenciaron. Adicionalmente, este método exigió a cada investigador una postura comprensiva e interpretativa acerca de dicha realidad presentada por las niñas y los niños del estudio.
Como resultado de la investigación, se esperó contribuir teóricamente a la producción de conocimiento académico que reconociera la importancia de las vivencias afectivas de niñas y niños como sujetos de derecho, pero también como constructores activos de su realidad y de su consecuente participación autónoma y creativa.