Resumen:
Actualmente la mayoría de la energía térmica utilizada proviene de fuentes fósiles o de combustibles convencionales como la leña. En Colombia, hay 1,6 millones de familias que usan leña diariamente para cocción, de los cuales 1,4 millones son familias rurales y las restantes 200 mil son familias urbanas. Este consumo desmedido ha propiciado en gran parte un problema de deforestación debido al consumo excesivo de leña como combustible tradicional. En caso del departamento del Cesar la deforestación ha alcanzado las 448 hectáreas. El alto impacto ambiental causado hace necesario la búsqueda exhaustiva de fuentes no convencionales de energía. Esta investigación se fundamentó en la evaluación del potencial energético de los residuos sólidos agroindustriales del proceso de extracción de aceite de palma africana (raquis, fibra y cuesco), analizando su disposición, generación, características fisicoquímicas y energéticas para determinar su uso como alternativa a la leña como combustible. Estos residuos sólidos presentaron un considerable poder calorífico que se encuentra en rangos de 16 – 19 MJ/Kg. De igual forma, presentan un potencial energético que solo para la zona norte del departamento del Cesar en el año 2016 fue de 9.302 TJ/año. Del mismo modo, se determinó que con la utilización de estos recursos biomásicos en zonas rurales como medio combustible se estarían dejando de consumir 43.484 t/año de leña, lo que representa 1.478 hectáreas de bosque que se podrían conservar, además si se considera que solo potencial energético de esta biomasa residual podría suplir el 2,06% de la demanda energética nacional, estaríamos ante un escenario que según lo establecido representan una disponibilidad de recursos de 98.730 t/año distribuidos en 78% de raquis, 14% de fibra y 8% de cuesco solo para suplir la demanda en zonas rurales del área de estudio torno a un sustituto de la leña y al desarrollo de fuentes de energía térmica no convencionales y amigables con el medio ambiente.