Resumen:
Con este trabajo se pretende indagar acerca de la reputación corporativa, sobre cómo se logra la misma a través de los públicos o grupos de interés con los cuales se relaciona la organización en su micro y macroambiente.
A través del tiempo las distintas organizaciones han demostrado que ante todo prefieren una reputación corporativa buena, antes que mala, y por ende prefieren cuidarla, mantenerla y sostenerla, y evitar al máximo que ésta llegue a deteriorase.
Para muchas empresas u organizaciones es indispensable el tema de la Reputación, por eso trabajan diariamente en ello, sin embargo para otras no lo es. Durante el texto se pretende hablar de la importancia de las relaciones que hay que tener con los stakeholders, porque son ellos quienes de alguna manera ayudan a realzar la reputación y la imagen de una entidad, y sin duda alguna, todo se hace desde comunicación, la herramienta fundamental para llevar a cabo todos los procesos de relacionamiento entre los diversos públicos.
Teniendo en cuenta que es desde las percepciones y opiniones de los grupos con los cuales se relaciona la organización, en sus ámbitos interno y externo, que se construye o se destruye la reputación, es importante explorar cómo se logra mantener una buena reputación corporativa al gestionar de manera estratégica la comunicación y así generar valor agregado.
La comunicación estratégica es fundamental aplicarla en una organización, puesto que de ésta depende en gran parte el relacionamiento que pueda haber entre la entidad y sus públicos de interés, es importante saberla abarcar y manejar, porque la comunicación debe enamorar a sus diferentes públicos; además hay que integrar de manera armoniosa todas las herramientas de comunicación.
Es importante tener en cuenta que más que informar a los públicos, hay que persuadir en ellos y recordarles a diario lo que hace la organización, porque en ésta hay que construir diferenciación y crear posicionamiento. Sin embargo hay que tener en cuenta que a los públicos hay que brindarles confianza y credibilidad, para hacer que la comunicación se integre.
En este artículo, se pretende diferenciar entre identidad corporativa, imagen, comunicación y reputación, puesto que cada una de ellas tiene diferente significado y pueden llegar a asociarse tanto, que se pueden confundir una con la otra.
Una buena reputación, no solo mejora las finanzas de una organización, sino que además funciona como un escudo protector en situaciones de adversidades con la misma.