Resumen:
Introducción: La sexualidad se inicia en el mismo momento de la concepción y una formación tardía conlleva a conflictos tales como el abuso sexual, embarazos prematuros, desviaciones sexuales, y adquisición de valores equí-vocos que serán difíciles de cambiar.
Además en nuestro medio los estudiantes solo alcanzan el nivel de básica primaria o los primeros años de secunda-ria, por lo tanto no llegan a tener una formación sexual adecuada. Es importante aclarar que el núcleo familiar en el cual se desenvuelven los estudiantes no manejan juicios claros que orienten adecuadamente a sus hijos en este aspecto.
Objetivos: Los objetivos del presente trabajo fueron desarrollar en los adolescentes una visión positiva de la sexuali-dad, una comunicación clara en las relaciones interpersonales, a construir sus propios valores a partir de un pensa-miento crítico, a comprender su comportamiento y el del otro y tomar decisiones responsables sobre su vida sexual.
Materiales y métodos: Se diseñó un proyecto de desarrollo social, de tipo educativo, con metodología participativa enfatizado en la promoción de la salud sexual, reproductiva y prevención de las enfermedades sexualmente trasmisi-bles.
Resultados: Se encontró que los estudiantes tenían poco conocimiento del funcionamiento de su propio cuerpo. En cuanto a los valores, tenían un conocimiento algo más adecuado, debido a que lo habían recibido por parte del plan-tel educativo. En general, todos los estudiantes captaron la información de una manera clara, para desarrollar con esto en su vida una sexualidad adecuada.
Conclusiones: A pesar de recibir información a diario sobre la sexualidad, los jóvenes no la asumen de manera responsable. La enseñanza que se brinde a los jóvenes sobre sexualidad, debe ser impartida tanto por sus padres o familiares como por sus profesores, en un ámbito de completa confianza entre ellos, para que sea asimilada adecua-damente y no solamente como una norma.