Abstract:
Indudablemente la contabilidad debe desarrollar esquemas
descriptivos y explicativos que faciliten la comprensión de las relaciones entre los
agentes sociales desde la óptica del control, la generación y la acumulación de la
riqueza, así como modelos prescriptivos que soporten su redistribución.
En esta perspectiva, resulta fundamental que la contabilidad no sólo se preocupe
por el control económico en los niveles micro y macro, sino también por el control
social en el escenario de lo público, pues la realidad requiere que se trascienda la
visión monetaria que informa solamente de la situación financiera, a una
contabilidad que informe sobre el devenir económico-social, y por tanto sea útil
para el control de la riqueza, a través del acompañamiento, intervención y
evaluación de la gestión pública, tanto estatal como no estatal.